Una de las salsa más apreciadas y consumidas en Argentina es la salsa golf o salsa rosada. La salsa golf parece ser que la inventó un Premio Nobel o eso es lo que dicen algunas de las versiones que hablan sobre su origen, cuentan que alrededor de 1920, Luis Federico Leloir (Premio Nobel de Química en 1970), cuando acudía al Club de Golf de Mar del Plata en Buenos Aires, cansado de comer camarones o lo que para nosotros son gambas y langostinos con mayonesa, pidió que le trajeran más ingredientes para probar distintas combinaciones.

Así, mezclando salsas de tomate o kétchup y alguna gota de esto y lo otro nació esta nueva receta de salsa golf o salsa rosada por su color. Una combinación que que a todos les encanta que y combina con todo o con casi todo. Nosotros en España al igual que en Argentina, hermanos nuestros, también la consumimos mucho, sobre todo con mariscos.

Como vais a comprobar es una salsa parecida a nuestra típica salsa rosa o salsa cóctel casera que utilizamos también para preparar cócteles de marisco en ocasiones especiales y que son tan apreciados por todos.

Si buscáis información encontraréis que también se la conoce también como Salsa Mil Islas (Thousand Island Dressing) y esta versión establece que fue creada en torno 1900 en Nueva Orleans, al sur de Estados Unidos de América y que en su elaboración original y básica llevaba estos ingredientes que luego fueron aumentando.

Nos quedaremos con las ganas de saber la verdad de su origen, pero eso sí, hoy vamos a poder prepararla y disfrutarla con la familia y los amigos. Así que vamos allá.

 

Salsa golf argentina o salsa rosada

Dificultad: muy baja
Coste: muy bajo

Ingredientes:

– Mayonesa
– Kétchup
– Vinagre de vino
– Sal
– Mostaza (opcional)

Preparación de la salsa:

La preparación de esta salsa argentina es de lo más fácil. Solo tenemos que mezclar los ingredientes.

No he puesto cantidades ya que podemos prepararla con más o menos ingredientes dependiendo de nuestros gustos, pero la base es cinco partes de mayonesa por dos de kétchup.

De esta forma pondremos cinco cucharadas soperas de mayonesa, que puede ser casera, aunque para esta salsa es mucho más cómodo que la utilices de bote y dos cucharadas de kétchup.

Agregamos una cucharadas sopera de vinagre de vino, ya que es algo más fuerte que el de manzana, un poco de sal y en este caso, yo le he puesto una pizca de mostaza.

 

 

A mi me gusta darle ese toque potente de la mostaza de Dijon pero con cuidado, ya que si me paso, sabría demasiado a mostaza y le quitaría el encanto y sabor peculiar de la salsa golf.

Una vez tenemos todo, mezclamos hasta integrar todos los ingredientes. Probamos y rectificamos de sal si hace falta y si tiene poco color podremos añadir una cucharada más de kétchup.

Es una salsa que se come fría, bien fría, así que metemos en el frigorífico y servimos justo antes de comer o mezclarla con lo que más nos guste.

Puedes utilizarla para preparar un cóctel de mariscos en muy poco tiempo, por ejemplo. Bon appétit!