Patacones o tostones de plátano macho frito
El patacón o tostón de plátano macho verde frito es una receta tradicional y muy típica de sudamérica. Es un plátano macho, lo recalco porque es importante, normalmente verde y que a la hora de manipularlo veréis que tiene una cáscara bastante más dura que lo habitual.
No es una cáscara que podamos quitar con la mano directamente, como podríamos hacer con un plátano de canarias o una banana.
¿El resultado de los patacones o tostones? Pues una especie de patata frita muy, pero que muy crujiente, que podemos comer al estilo de chips salados o agregarle azúcar por encima. Os va a sorprender porque no sabe a plátano, o casi no sabe, es como la patata frita.
Yo les puse sal y es una gozada, empiezas a comer y no puedes parar. Al final te comes un plátano entero sin darte cuenta. Más adelante, os enseñaré a hacer unas fantásticas barquitas para rellenar con el plátano macho que son increíbles.
¿Qué os parecen estos patacones o plátano macho frito? ¿Habéis preparado alguna vez el patacón o plátano macho frito? ¿Sabes alguna otra receta que lleve el plátano macho frito como acompañante?
Patacones o tostones de plátano macho frito
Dificultad: muy baja
Coste: bajo
Ingredientes: (4 personas)
– 4 plátanos macho verdes
– Sal
-Aceite de oliva o girasol (cuestión de gustos)
Preparación de tostones da plátano macho:
Primero le quitaremos la cáscara a los plátanos. Para ello le haremos dos cortes a lo largo. Uno por la parte superior y otro por la inferior. Sin llegar a la carne, claro. Retiramos la cáscara y troceamos. Como de un par de centímetros de grosor, aunque podéis hacerlo más grueso si queréis. Reservamos.
Ponemos un film transparente en la tabla y reservamos otro trozo. Luego los utilizaremos para aplastar el plátano.
Ponemos la sartén con aceite para freír, ya sea de oliva, que le dará más sabor, o de girasol, que es un sabor más neutro, a fuego medio. Cuando está el aceite caliente, vamos a ir echando poco a poco los trozos de plátano.
Vamos a freírlos por encima, no mucho, que tome un poco de color solamente. Los vamos poniendo sobre papel de cocina.
Ahora iremos aplastando los trozos. Debajo el film, ponemos el trozo y encima otro film. Aplastamos con un vaso o con un recipiente y reservamos.
Ponemos la sartén a fuego fuerte y volvemos a freír. Cuando tomen color, y nunca quemados, los pasamos a un papel de cocina para eliminar el exceso de aceite. Echamos sal inmediatamente por encima y listos para comer.
Si queréis podéis poner azúcar por encima o incluso ponerlos junto a alguna salsa, como la salsa mayonesa casera que podéis mirar en mi blog. Bon appétit!