Musaka de berenjenas tradicional griega
Musaka de berenjenas tradicional griega. La musaka de berenjenas o moussaka es quizás una de las recetas más conocidas de la gastronomía griega y balcánica. Os la dejo paso a paso para que no os perdáis un detalle. Para que os hagáis una idea general es como una lasaña pero sustituimos la pasta por láminas de berenjena.
Como he comentado, este plato está basado en la berenjena y la carne como ingredientes principales, y rematado con una fantástica y jugosa bechamel. La forma tradicional de hacer la musaka es friendo los ingredientes, y es así como os voy a enseñar a hacerla, pero tiene el pequeño inconveniente que, para algunos, es demasiado aceitoso.
Eso podemos reducirlo de varias formas, como al terminar de hacer la carne poner un colador debajo para que suelte el exceso de aceite o hacer las berenjenas y las patatas a la plancha o al horno. El sabor no cambia y es fantástico.
Lo que nos ahorramos es el aceite que suelta en la zona inferior, que como digo, es aceite de oliva virgen, sea demasiado para muchos a la hora de comerla. Yo he sustituido en esta ocasión la carne de cordero por carne de ternera y cerdo, pero si queréis, la hacéis con carne de cordero. Es una receta bastante fácil pero algo entretenida.
Musaka de berenjenas tradicional griega
Dificultad: media
Coste: bajo-medio
Ingredientes: (6-8 personas)
– 1-2 berenjenas grandes
– 2 patatas medianas
– 1 cebolla
– 400 gramos de carne picada de ternera y cerdo (250 gramos y 150 gramos)
– 1 puerro
– 3-4 dientes de ajo
– 1 tomate maduro grande
– 1 bote de salsa de tomate
– 1/4 de vaso de vino (blanco o tinto, el que tengamos en casa)
– Queso para fundir rallado
– Aceite de oliva virgen extra
– 1 rama de canela
– 1 hoja de laurel
– Pimentón dulce molido, si es de La Vera, mejor
– Perejil fresco
– Media cucharadita de azúcar
– Sal
– Pimienta jamaicana en granos (old spice)
– 1 litro de leche
– Harina de trigo
– Pimienta negra molida
– 30 gramos de mantequilla
– Nuez moscada rallada
Preparación de la mousaka tradicional:
Lo primero que haremos es lavar las berenjenas y cortarles el tallo superior. Secamos y cortamos en láminas a lo largo. Si queremos las cortamos de nuevo por la mitad.
Les echamos un poco de sal por encima y las ponemos en un recipiente para que suelten el agua durante al menos media hora. Mientras haremos el resto de cosas. Reservamos.
Ponemos una olla mediana y agregamos un poco de AOVE. Picamos el puerro después de lavarlo y la cebolla. Los añadimos a la olla y pochamos hasta que están blandos. A continuación añadimos la carne y refreímos. Damos vueltas hasta que está lista y echamos los ajos picados.
Damos unas vueltas y añadimos una cucharada de pimentón dulce, removemos y agregamos el vino, dejamos que evapore unos minutos, le ponemos dos cucharadas de salsa de tomate y el tomate fresco rallado. Mezclamos y dejamos unos minutos a fuego medio.
Incorporamos el laurel, las bolas de pimienta de Jamaica, la sal, una pizca de azúcar y una canela en rama. Añadimos ahora medio vaso de agua y dejamos a fuego bajo-medio hasta que reduzca casi por completo el líquido.
Un poco antes, le agregamos un puñado de perejil fresco picado. Apartamos y reservamos. Rectificamos de sal si hace falta.
Secamos el exceso de agua de las berenjenas con papel absorbente. Ponemos una sartén y freímos las berenjenas y las patatas cortadas a rodajas. Reservamos. Como os dije antes, si queremos quitar un poco de aceite, las podemos hacer a la plancha o en el horno y así eliminamos aceite en exceso.
Vamos a montar la musaka. Para ello ponemos en una fuente una capa con las berenjenas, encima otra con patatas y cubrimos con la mitad de la carne. A la carne, le quitamos previamente las bolas de pimienta, el laurel y la canela.
Encima de la carne, ponemos otra capa de berenjenas y otra de carne. Sobre todo ello agregamos un poco de queso rallado. Reservamos y hacemos la salsa bechamel. Una vez la tenemos, os dejo el enlace, cubrimos todo con ella y añadimos más queso por encima. Metemos en el horno a 170 grados y dejamos que dore la parte superior.
Un vez lista, dejamos enfriar ya que, si la bechamel está muy caliente, no se pueden hacer los cortes bien ya que se derrama. Lo mejor es hacerla de un día para otro, luego calentamos las porciones en el horno o en el microondas y quedan perfectos. Bon appétit!