Migas de pastor

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Migas de pastor o migas a lo pastor.

 

El plato de migas de pastor o migas a lo pastor es uno de los que más tradición tiene en la zona del norte de la Península Ibérica. Es un plato muy cotizado por su sencillez, su sabor y su aporte energético que ayudan a los caminantes a soportar largas caminatas o tiempos algo más fríos de lo habitual.

Hay personas que la noche anterior suelen mojar el pan en leche y después ponerlo en un colador para eliminar el exceso de líquido, o salpicarlas con un poco de agua, de esa forma se hidrata el pan y queda algo menos seco.

Como siempre la elección es de cada uno. También podemos sustituir la panceta de esta receta por un trozo de jamón con bastante tocino.

De esa forma no tenemos que agregar dos ingredientes diferentes y el pan absorbe todo el sabor del jamón con su propia grasa. Sea como sea la variante, es un plato fenomenal.

 

Migas de pastor

Dificultad: baja
Coste:bajo

Ingredientes: (4 personas)

– 800 gramos pan de pueblo seco
– 1 cabeza de ajos
– 1,5 cucharadas sopera de pimentón
– 150 gramos de jamón
– 100 gramos de panceta
– Aceitunas negras sin hueso
– 4 mandarinas y uvas si queremos
– Sal
– Aceite de oliva virgen extra

 

Preparación de las migas de pastor:

Cortamos el pan a daditos o lo desmenuzamos todo lo que podamos. Luego le iremos dando con la cuchara y los desmenuzamos más aún, así que no tienen que quedar completamente partidos. Reservamos.

En una sartén grande, echamos un fondo de aceite de oliva y sofreímos los dientes de ajo ya pelados. Me consta que hay sitios donde se dejan enteros y con la piel. Ya que sirven para dar el sabor y luego no se comen.

Cuando están los ajos lisos, sin quemarse, podemos quitarlos o dejarlos según nos gusten. Si los dejamos los aplastaremos también para ligarlos con el pan.

A continuación agregamos la panceta cortada a daditos, rehogamos e incorporamos el pan desmenuzado. Es ahora cuando empezaremos a dar con la pala de madera para hacer los trozos más pequeños.

Removemos y al cabo de unos minutos incorporamos el pimentón. Mezclamos y añadimos la sal y algunas aceitunas negras. Seguiremos removiendo para mezclar bien todos los sabores.

Si vemos que se nos queda algo seco, podemos añadir, dos o tres cucharadas de agua y seguir removiendo.

El pan tiene que absorber las grasas, adquirir el color rojo del pimentón y tostarse un poco. Ni mucho menos tienen que quedar apelmazadas, todo lo contrario, tienen que quedar sueltas.

Una vez las tenemos, las servimos acabadas de hacer y acompañadas de gajos de mandarina o de uvas. Bon appétit!

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