¿Te gustan los aliños y las ensaladas con mejillones? Os enseño a preparar unos riquísimos mejillones a la vinagreta que son un fantástico plato para hacerlo durante todo el año, económico y no tiene ninguna dificultad.

Los mejillones combinados con el picadillo y la salsa vinagreta tiene un sabor extraordinario y os aseguro que les encantará a todos.

Cocina fácil, casera y tradicional, que la hacen deliciosa. Si queréis cambiar el aliño de los mejillones por otro tipo de vinagreta que os guste más es otra opción, así que experimenta!

Mejillones con salsa vinagreta

Dificultad: fácil
Coste: barato

Ingredientes:

– 1 kilo de mejillones medianos
– 1 tomate grande
– 1 pimiento verde
– 1 Pimiento rojo
– 1 cebolla mediana
– Sal
– Aceite de oliva virgen extra
– Vinagre de Jerez

Preparación de los mejillones con salsa vinagreta:

Limpiamos los mejillones y le quitamos la barbas. Los metemos en una olla con dos dedos de agua y lo ponemos a fuego bajo. Tapamos y dejamos que se abran. Si ponemos muy fuerte el fuego los mejillones pueden no abrirse y morir por el calor intenso.

Los mejillones que estaban abiertos anteriormente los desechamos, ya que si están así, es posible que estén muertos y nos pueden hacer daño.

Una vez abiertos todos por la cocción, dejamos que se enfríen un poco y les quitamos los restos de barbas o cuerda que puedan tener pegados al músculo.

Desechamos una de las mitades de la concha y la otra parte con el cuerpo del mejillón los colocamos encima de un plato grande.

Hacemos un picadillo, cortando a dados el tomate, la cebolla y los pimientos. Al picadillo también se le conoce como piriñaca o periñaca en el sur de España. Es simplemente la mezcla de esos ingredientes picados y mezclados con sal, vinagre y aceite.

Aliñamos el picadillo por encima. Mezclamos aceite de oliva virgen extra y sal al gusto hasta formar la vinagreta. Mezclamos bien y lo echamos por encima de los mejillones uniformemente.

Si queremos, podemos agregar por encima, una pizca más de vinagre y de aceite. Los ponemos una media hora en el frigorífico y listos para servir. Bon appétit!