Jibia con patatas, un guiso marinero fácil y delicioso
Si te gustan los platos marineros y con sabor no puedes perderte esta receta casera de jibia o sepia con patatas. A casi todo el mundo le gustan los guisos de cuchara y pobrecito del que se lo pierde, no sabe lo que hace.. Si tienes la oportunidad de comprar jibia, ya sea fresca o congelada, no lo dudes y prepara esta receta con patatas. Es muy fácil y vas a tener un plato fantástico en muy poco tiempo.
El sabor que le otorga la jibia a las patatas es espectacular, así que es un guiso totalmente recomendable ya que también, aparte del sabor, es muy nutritivo.
Este guiso de jibia con papas es muy típico del litoral andaluz, por lo que podemos encontrarlo desde las costas de Almería, a las de Huelva. Cada una con sus propias modificaciones, como suele ocurrir con los guisos tradicionales, pero siempre con la misma base del sofrito, las patatas y la sepia.
La jibia, o sepia, porque también se le conoce a este guiso como papas con sepia, la podemos comprar en nuestra plaza de abastos, pescadería habitual o incluso a unas malas, en un congelado cercano a nuestra casa.
Recordar que la jibia, sepia o choco es lo mismo pero que se suelen distinguir o clasificar según el tamaño de estos moluscos cefalópodos. Se les denomina choco a los ejemplares más jóvenes y sepia o jibia a los adultos.
Esto hay que aclararlo un poco ya que también depende de la zona geográfica como Huelva, Cádiz o Sevilla se le conoce como “choco”, y en otras regiones del norte, como Cantabria, recibe el nombre de jibia.
Guiso de jibia o sepia con patatas
Dificultad: baja
Coste: bajo
Ingredientes: (4 personas)
– 1 o 2 jibias o sepias medianas
– 1 cebolla
– 1 tomate maduro mediano
– 6 dientes de ajo
– 1 zanahoria
– 1 kilo de patatas
– 1 vaso de vino blanco
– 1/2 litro de caldo de pescado
– Pimentón dulce de La Vera
– Sal
– 1 hoja de laurel
– Pimienta molida
– Aceite de oliva virgen extra
Preparación del guiso de jibia:
Limpiamos y picamos las verduras. Los ajos los laminamos y las patatas las reservamos.
Ponemos un fondo de aceite de unas ocho cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra en una olla con tapa y hacemos un sofrito con los ajos, la cebolla, la zanahoria, el laurel y posteriormente el tomate. Tiene que quedar todo muy bien pochado y blando. Mira este artículo sobre cómo preparar un sofrito perfecto. Seguro que vas a descubrir cosas muy interesantes para que tus guisos marineros y arroces sean de diez.
Una vez está este paso, que es bastante lento ya que en el sofrito es donde está la base del sabor del guiso, añadimos una cucharada rasa de harina de maíz refinada para espesar un poco la salsa. Mezclamos y dejamos unos segundos para que se haga y no quede cruda.
A continuación, añadimos el pimentón dulce de La Vera. Mezclamos rápidamente, dejamos unos segundos y añadimos el vino.
No dejes mucho más de cinco segundos el pimentón porque se puede quemar y tomará un sabor amargo que estropea el plato.
Dejamos evaporar el alcohol y que se consuma el vino. Salpimentamos.
Añadimos ahora las jibias o sepias limpia troceada a la olla. Cubrimos con caldo de pescado, tapamos y dejamos a fuego medio durante cuarenta y cinco minutos.
Pasado ese tiempo, pelamos las patatas, las limpiamos con agua y las añadimos chascadas o troceadas al gusto. Añadimos agua si es necesario y dejamos hasta que las patatas están listas.
Podemos probar la textura de la jibia para ver si está en su punto. Debe tener un puntito de textura, como las pastas, algo “al dente”.
Si durante el proceso de cocción vemos que necesita más caldo o agua, iremos añadiendo poco a poco y siempre caliente. Ya que si están haciéndose las patatas y añadimos agua o caldo frío, las patatas pueden endurecerse. Debe quedar una salsa ni muy líquida ni muy espesa.
Rectificamos de sal si es necesario y apartamos para dejar reposar antes de servir. Bon appétit!