Huevos de codorniz escoceses
Sorprende a tus invitados con este entrante original de huevos de codorniz escoceses. Es simplemente una variante más fácil y de tamaño reducido de los típicos huevos a la escocesa o escoceses tradicionales. La elaboración es también muy sencilla ya que vamos a utilizarlos como aperitivo y quedan realmente vistosos.
Si te animas a preparar algo diferente, no lo dudes, esta idea es genial para reuniones de amigos o para pasar un buen rato con la familia antes de los platos principales.
Los ingredientes son sencillos y fáciles de encontrar en casi cualquier supermercado cercano y el sabor y la textura estupendos para comerlos en un par de bocados. Lo mejor de todo es que combinan perfectamente con una ensalada o con cualquier salsa que quieras ponerles como acompañamiento.
Si quieres ver cómo se hacen los huevos a la escocesa o huevos escoceses tradicionales, puedes también pasarte por la receta de mi blog. 😉
Huevos de codorniz escoceses
Dificultad: baja
Coste: bajo
Ingredientes:
– 1 docena de huevos de codorniz frescos
– 350 gramos de carne picada de cerdo o mixta
– Perejil fresco
– Tomillo
– Pimienta negra molida
– Sal
– Aceite de oliva para freír
– Pan rallado
– Harina
– 1-2 huevos frescos de gallina
Preparación de los huevos de codorniz a la escocesa:
Ponemos los huevos en abundante agua a hervir durante diez minutos. Pasado ese tiempo, dejamos enfriar y pelamos con cuidado. Son más pequeños y vamos a necesitar algo más de paciencia que con los huevos de gallina. Reservamos.
Echamos las especias al gusto y mezclamos con la carne picada de cerdo o mixta que hayamos comprado. Yo siempre compro la carne al peso y luego le digo al carnicero que me la pase por la máquina y la pique. Nunca compro carne ya picada de las bandejas de los supermercados ya que, si miras en los ingredientes, verás que no es carne picada totalmente y tiene de todo casi, menos carne..
Una vez hemos aliñado la carne al gusto, envolvemos los huevos de codorniz con la carne y nos saldrán una especie de albóndigas. Reservamos.
Pasamos las albóndigas por harina y luego por huevo batido y pan rallado. Así la habremos empanado y estarán listas para freír.
Ponemos abundante aceite en una sartén y freímos nuestros huevos de codorniz escoceses.
Deben quedar con un color dorado pero sin quemarse ya que la capa de carne es fina y se hace rápido. Pasamos por papel de cocina para eliminar el exceso de aceite y listas para comer con una salsa por encima al gusto o una ensalada. Bon appétit!