Si nunca habéis preparado un guiso de cerdo a la cerveza, tenéis que ver mi receta y probarla. Es una elaboración muy sencilla y que requiere poco tiempo en la cocina, además la combinación de sabores la hace única y hay verdaderos adictos a su sabor.

He hablado del sabor pero la carne os va a salir tierna y de lo más jugosa, que en este caso he utilizado carne o magro de cerdo, pero podéis utilizar ternera. Ambas carnes son bastante económicas y hay poca diferencia entre el precio de una y otra. Imaginaros cómo tiene que estar si utilizamos medallones de solomillo en vez de tacos de magro. Se derretirán en la boca..

Otra de las cosas por las que me gustan este tipo de recetas es que son guisos caseros que se salen de los sabores a los que estamos acostumbrados. La cerveza le aporta un toque ácido suave y diferente. Cada cerveza, le aportará su sabor único, por lo que podemos ponerle la que más nos guste.

Si quieres dar otra vuelta de rosca a la receta, incluso le puedes añadir una cucharada de miel. Vas a triunfar.

 

Guiso de cerdo a la cerveza

Dificultad: baja
Coste: bajo

Ingredientes: (4 personas)

– 750 gramos de magro de cerdo en tacos
– 2 zanahorias
– 1 cebolla
– 1 trozo de puerro
– 3 dientes de ajo
– 100 gramos de setas frescas
– 1 trozo de pimiento para guisar, verde naranja o rojo
– 1 lata de cerveza rubia
– 1/2 vaso de caldo de carne
– Sal
– Pimienta molida
– Aceite de oliva virgen extra
– Harina de maíz refinada (opcional para espesar)
– Miel (opcional)

 

Preparación del guiso:

Limpiamos y troceamos las verduras. Reservamos.

Laminamos los dientes de ajo. Ponemos en una olla rápida un fondo de aceite de oliva virgen extra y cuando esté caliente, añadimos la carne troceada de cerdo. Si queremos podemos hacer el guiso con carne de ternera, no hay problema. La preparación es la misma.

El aceite tiene que estar caliente, si no lo está se cuece la carne. Pero tenemos que dorarla. Una vez dorada, la carne la sacamos a un plato y reservamos.

 

 

Bajamos un poco la potencia del fuego y echamos los ajos. Doramos y añadimos la cebolla laminada o troceada, como queramos.

 

Para los amantes de la cocina más tradicional os podéis pasar por mi receta de estofado de cerdo. Otro guiso tradicional que no puedes perderte.

 

Cuando tome color, agregamos el resto de verduras troceadas. Dejamos que se pongan blandas unos minutos.

 

 

Salpimentamos y agregamos, una vez está blanda la verdura, añadimos la cerveza.

Yo he añadido cerveza rubia, podéis elegir la marca que más os guste. Incluso podemos añadir una cerveza negra, que le dará un sabor y color diferente y característico.

Una vez la añadimos tenemos que esperar a que reduzca, por lo menos hasta una cuarta parte.

A continuación añadiremos medio vaso de caldo.

 

 

Dejamos que empiece a hervir y cerramos la olla. Dejamos veinte minutos con la olla cerrada que hierva. Pasado ese tiempo, apartamos y abrimos la olla con cuidado. Siempre dejando salir el vapor y la presión con cuidado.

Ponemos de nuevo al fuego y espesar la salsa a nuestro gusto. Si la queremos más espesa la salsa de cerveza, podemos añadir una cucharadita de harina de maíz refinada diluida en un poco de agua al guiso. Dejemos que engorde y reduzca. Rectificamos de sal si hace falta y si queremos darle un toque dulce, le añadimos una cucharada de miel.

Freímos unas patatas y las servimos con el guiso de carne y la salsa por encima. Bon appétit!