Currywurst al estilo de Berlín
Os presento una receta de salchichas alemanas. Currywurst al estilo de Berlín. Hay varias versiones del currywurst pero parece ser que esta es la original o por lo menos una de las formas en que podemos comerlas más habitualmente.
En este caso las salchichas son tipo Bockwurst, que vienen ya cocidas, aunque nosotros las pondremos un par de minutos en agua hirviendo, solo para calentarlas. Si lo hacemos más tiempo se pueden abrir y al cortarlas se desprende la piel.
Si son crudas las que hemos comprado, nosotros antes de ponerlas en la parrilla o la plancha, tendremos que hervirlas.
En cuanto al currywurst es un tipo de salsa en las que van bañadas las salchichas cuyo sabor predominante (bingo!) es el curry, como podéis imaginar, y en una base de tomate preferiblemente natural.
Algunos utilizan para esta salsa el kétchup, pero yo no lo he utilizado ya que pienso que no es un ingrediente original de la receta. Si me equivoco, podéis dejar vuestras opiniones en los comentarios. El currywurst alemán va acompañado de unas patatas gajo fritas, aunque podemos acompañarlas también con puré de patatas o una ensalada de col.
Currywurst estilo de Berlín
Dificultad: muy fácil
Coste: bajo
Ingredientes: (4 personas)
– 8 salchichas alemanas tipo Bockwurst
– 3 dientes de ajo
– 1 cebolla mediana
– 500 gramos de tomates muy maduros
– Curry de calidad
– Pimienta negra
– Comino molido
– Azúcar blanco
– Sal
– Aceite de oliva virgen extra
– Patatas
Preparación del currywurst:
Vamos a preparar la salsa y para ello laminamos los ajos y los ponemos a freír en una olla o sartén con fondo. Encima cuando empiezan a tomar color, echamos la cebolla muy picada. Refreímos unos minutos y cuando está transparente, agregamos los tomates pelados y cortados en dados pequeños. De esa forma se deshacen más rápidamente.
Si te gusta la cocina y los productos alemanes, puedes visitar mi receta de salchichas alemanas tipo Weisswurst con cebolla caramelizada y patatas. Fácil y con todo el sabor tradicional de la cocina alemana.
Si no tienen mucho líquido, podemos agregar un poco de agua. Salpimentamos, agregamos una cucharadita de azúcar y un poco de comino molido. Ahora es cuando podéis poner, si queréis, un buen chorro de kétchup, aunque yo no lo hice.
Agregamos dos cucharadas colmadas de curry tapamos. De esa forma el tomate irá tomando calor y deshaciéndose. Lo dejamos hasta que tenga consistencia de salsa y apartamos.
Pelamos las patatas y las cortamos en gajos. Las freímos en abundante aceite caliente. En otra sartén o una olla ponemos las salchichas con agua a hervir y las dejamos dos minutos. Eliminamos el agua y agregamos un poco de aceite para dorarlas.
Eliminar bien el agua para que no salpique al agregar el aceite. Cuando tomen color las salchichas podemos cortarlas a rodajas de un par de centímetros y reservamos en la misma sartén caliente.
Ponemos un plato y hacemos una base con las patatas, encima las salchichas y sobre ellas la salsa. Sobre todo ello echamos un poco más de curry y listas para comer. Bon appétit!