Croquetas caseras de pringá
Las croquetas caseras de pringá, o croquetas de berza, son una delicia para el paladar y no hay nadie a las que no les gusten. Las croquetas se hacen con la carne procedente de una berza o guiso por ejemplo. Es decir, la carne, el chorizo, la morcilla y el tocino.
Normalmente se suelen apartar estos ingredientes y se comen después de las alubias y las verduras con un trozo de pan.
Todo un lujo comido moderadamente. Yo lo que hago es reservar parte de la carne para las croquetas, pero no toda. Así, tengo mi fabulosa pringá, que como después de las verduras, y al día siguiente mis fantásticas croquetas.
Y si te quedas con ganas de más croquetas caseras, puedes ver mi receta de croquetas de gambas al ajillo o las tradicionales croquetas de jamón ibérico. Te van a encantar!
Croquetas caseras de pringá de berza
Dificultad: media
Coste: medio
Ingredientes: Las carnes son procedentes de un potaje o berza que hacemos con anterioridad
– 1 chorizo
– 1 morcilla
– 1 trozo de carne de cerdo (magro o costillar)
– 1 trozo de tocino
– 1 cebolla
– 1/2 litro de leche
– Harina de trigo
– Nuez moscada
– Pimienta negra
– Sal
– Aceite de oliva virgen extra
Preparación de las croquetas:
Troceamos toda la carne con una picadora. Según queramos, la podemos picar más o menos. Picamos la cebolla y la pochamos en una sartén o en una olla con un poco de aceite de oliva virgen extra.
Cuando esté medio lista la cebolla añadimos la carne picada. El aceite que suelta hace que no necesitemos mantequilla ya que empieza a soltar la grasa. Removemos y añadimos dos cucharadas de harina. Mezclamos bien.
Cuando esté bien mezclada la harina, añadimos un poco de leche a temperatura fría. Iremos mezclando poco a poco y después añadiendo la leche. De esa forma iremos haciendo la masa de las croquetas. Le añadimos un poco de pimienta molida al gusto y de nuez moscada.
Dejaremos que espese la masa un poco y cuando esté listo dejamos que se temple en la misma sartén. Después la pondremos en un recipiente para que se enfríe. Cuando esté fría la metemos en el frigorífico durante un mínimo de dos horas para que coja cuerpo.
Cuando esté fría la masa, tomaremos porciones de la masa y haremos las croquetas. Las rebozamos con huevo y luego las pasamos por pan rallado. Las freímos, pasamos a un papel de cocina para que eliminen el exceso de aceite y las servimos calientes. Bon appétit!
Por dios, qué cosa más rica. Por qué todo lo bueno engordará! Felicidades por el blog.
Y la sal cuando se le añade?
En la mezcla, solo si la necesita, normalmnte la pringa ya está sabrosa