Os presento esta receta de champiñones rellenos con crema de jamón y queso. Es muy rápida de preparar y es un entrante diferente y muy sabroso.

Los champiñones rellenos siempre triunfan en la mesa, aunque la receta que más conocemos suele ser los champiñones al ajillo, pero si queréis experimentar con sabores y combinaciones nuevas, como la crema de jamón y el queso gratinado, esta es vuestra receta.

 

Champiñones rellenos con crema de jamón y queso

Dificultad: muy fácil
Coste: bajo

Ingredientes:

– 350 gramos de champiñones grandes frescos
– 1 tarrina de crema de jamón cocido
– Queso Camembert o alguno que sea cremoso
– Sal
– Pimienta blanca molida
– Aceite de oliva virgen extra

 

Preparación de los champiñones rellenos con crema de jamón y queso:

Antes que nada hacemos la mamaliga o polenta, y dejamos enfriar. Podéis pasaros para ver cómo se hace pinchando en el enlace de mi receta. No es obligatorio hacerlo con polenta y podemos poner, una vez que están los champiñones terminados una rebanada de pan.

Limpiamos los champiñones y les quitamos el tallo. Con un cuchillo pelador, le quitamos la piel con cuidado a los champiñones. No es imprescindible y requiere algo más de tiempo, pero quedan más bonitos al no tener manchas.

 

 

Cortamos un poco de mamaliga ya fría (polenta) con forma cuadrada y la ponemos de base. Si no vamos a poner polenta, utilizaremos la rebanada de pan que os comenté antes.

Rociamos con un poco de aceite de oliva virgen extra por el exterior de los champiñones. A continuación, ponemos en el interior de cada champiñón, un poco de sal y pimienta, la crema de jamón cocido y encima del todo el conjunto un trozo de queso Camembert o algún queso que nos guste y sea muy cremoso.

Pinchamos con un palillo sobre la mamaliga y gratinamos a temperatura media para que el champiñón se haga por dentro. Sacamos y servimos bien calientes. Bon appétit!

 

Podemos cambiar el queso Camembert por cualquier otro que nos guste más o tengamos en casa siempre que podamos cortar a dados. También podemos probar rellenando los champiñones con paté de cerdo ibérico, que está riquísimo.