Brownie de chocolate negro, el delicioso y contundente postre americano
¿Quieres preparar este riquísimo brownie de chocolate? Os enseño a preparar este fantástico brownie de chocolate negro que va a ser la delicia de los amantes al postre y a los dulces caseros y con tradición. El brownie es un postre típico importado de América y que actualmente podemos encontrar en muchísimas cafeterías y tiendas de dulces.
Es muy fácil de realizar y está realmente rico, eso sí, para los amantes incondicionales del chocolate. Un trozo sí, por favor, dos… me lo pienso, porque es contundente. Ya sabes que si te gusta mi receta de brownie de chocolate puedes dejar tu comentario y seguirme en las redes sociales!
Brownie de chocolate negro
Dificultad: baja-media
Coste: bajo-medio
Ingredientes: (8-10 personas)
– 5 huevos
– 400 gramos de chocolate negro de repostería
– 250 gramos de mantequilla
– 100 gramos de nueces peladas
– 125 gramos de harina de trigo
– 325 gramos de azúcar
– Aroma de vainilla (opcional)
– Una pizca de sal
– Un cuarto de cucharilla de levadura química (opcional)
Preparación del brownie de chocolate:
En un recipiente, ponemos al baño maría o en el microondas, yo lo puse en el micro, la mantequilla y el chocolate. No lo ponía mucho tiempo, un minuto en descongelar y lo movía, hasta que se derrite y no llega a una temperatura elevada.
En otro recipiente, batimos los huevos con el azúcar, la levadura (opcional ya que en realidad no lleva), y la esencia de vainilla si queremos. Batimos hasta que está todo ligado.
Tamizamos la harina y añadimos las nueces peladas. Añadimos el chocolate mezclado con la mantequilla y reservamos un poco para decorar por encima. Volvemos a mezclar bien y añadimos la harina tamizada hasta formar una pasta semi-espesa.
Una vez la tenemos, ponemos papel para horno en el molde. Yo creo que es lo mejor, ya que luego lo levantamos y aparte de no ensuciar casi nada, sale solo. Podéis ver las fotos.
Echamos la mezcla encima del molde y lo metemos en el horno a 180 grados durante 40 minutos. Luego comprobamos que está listo cuando metemos un palillo y sale sucio, no nos conviene que se haga totalmente.
Para que quede jugoso por dentro, no tiene que salir seco como los bizcochos, pero tampoco totalmente mojado.
Una vez listo, sacamos del horno, dejamos enfriar y una vez, totalmente frío, cortamos y montamos en el plato con un poco de chocolate por encima, y yo le puse hojas de melisa, que le dan un frescor en boca muy original. Bon appétit!